Todo en esta vida es un camino de preparación y lleva un proceso. Caminemos hacia la Perfección Humana y hacia la Santidad, y la Santidad es un camino de Perfección, un estado de gracia que empieza en nosotros mismos.
La Santidad es la perfección del alma, poner en práctica Virtudes Cristianas, dar el mejor esfuerzo, tener la capacidad de levantarse, vencer nuestros problemas y convencernos de que sí podemos con ellos, ir más allá de lo que se piensa, aprender a perdonar.
Jesús nos da aspectos espirituales para crecer; cuando permitimos que Dios nos llene con su gracia, podemos vencer al pecado.
Señor mío hazme un instrumento de tu paz. Amén.